18/5/08

LETRAS, LETRAS, LETRAS


Permitidme hoy hacer unas divagaciones sobre el papel del letrista en un grupo de música de baile, un trabajo ingrato y poco reconocido, y exponeros cual es el planteamiento de los textos en Pandilleros, y así iros descubriendo q carajo es lo q estamos haciendo ¿un musical con libreto y actores? ¿letras/diálogo al estilo Pimpinela? ¿Descripciones de situaciones?
Ante todo, citar a James Brown, padre del funk, en una entrevista tiempo ha: "Keep your lyrics universal". O sea, haz q tus letras sean universales y puedan llegar a tooodo el mundo. El funk y la música disco son géneros musicales hechos para bailar -aunque se puedan hacer analisis más profundos en otros niveles- y el papel de las letras muchas veces es la de crear lemas o proclamas, tonadas que sean facilmente comprensibles y permitan ser coreadas al beat de la música. No deja de ser igual q en la salsa, el bugalú y los ritmos afro-caribeños, donde el solista hace unos reclamos q los coros no dejan de repetir. Los funkateros de hoy hemos aprendido de los maestros del género, y para definir nuestro estilo individual hemos emulado/plagiado/homenajeado a los clásicos tanto en música como en letras. No es dificil encontrar en grupos de Deep Funk canciones q nos recuerdan vivamente a otras de los Meters, Brown, los Blackbirds o tantos otros, y es común encontrar las mismas frases o palabras en inglés -con sus variaciones- en los estribillos de multitud de canciones de funk actuales. "Everybody is groovin'...", "Funky woman...", "Let's dance all night...", en fin, q os voy a decir, los Manero hemos creado letras a piñón a partir de los estereotipos líricos del género, hemos sableado a los Temptations, a Barry White y a otros. Primero por nuestro limitado conocimiento del inglés, y también pq a priori nos resulta algo embarazoso hacer letras en castellano para temas de baile, tenemos miedo a que esas frases q quedan tan redondas en anglosajón, queden ridiculas y cursis al estilo Greta y los Garbo o La Unión. Porque no nos engañemos, las letras hablan todas de lo mismo -salvo excepciones honrosas-: baile, amor, noche, fiesta. Esos clásicos de la literatura musical.
Yo personalmente he ido evolucionando mi mentalidad a medida q hemos ido haciendo discos con unos y otros. En un principio no otorgaba más q una importáncia formal a los textos -q suene bacileta y rítmico en inglés-, pero, por esas cosas de q uno quiere expresar pensamientos complejos que tiene sobre la vida (craso error, dirán algunos, pero es dificil ir contra uno mismo), he intentado ajustar mis textos a la música y intentar que enriqueciesen la personalidad del grupo y me permitiesen explorar mi faceta como letrista.
Primero lo hice en "Sweet Movimiento", en inglés, tratando de hablar en terminos similares a los de Sly y los hippys del funk, hablando de hermandad, de comunidad y introduciendo un tono reivindicativo muy usual en el funk de finales de los 60. Escucho ese disco y me rio pq reconozco mi estado de ánimo en esa época pese a lo estereotipado del discurso, pero quedaba claro q se acababan los tópicos y q había q avanzar y pasarse al castellano para ampliar el discurso.
Click! fue el disco del paso al castellano, hay cosas q suenan más cool y otras q suenan más chungalis, pero mimé bastante las letras (como en Rectificar o Adoro este rollo) y quedé bastante satisfecho con él. La idea era escribir textos que hablasen sobre mi/nuestras vidas de un modo personal e identificable, con un lenguaje próximo y expresiones usadas por nosotros comunmente, y por otro lado mantener estribillos cantables y temas más hedonistas en determinados momentos más "comerciales". Evidentemente te expones a q las letras no gusten a determinada gente, ya q estás diciendo cosas q pueden entender y q puede q no compartan conceptual o formalmente. Pero uno no puede hacer las cosas en base a lo q los demás piensen, y os aseguro de que doy una gran importáncia al trabajo de hacer letras, y a parte de disfrutar como un loco yendo con mi cuaderno arriba y abajo escribiendo en el metro o en un parque, dedico muchas horas y esfuerzo para alicatar textos que enriquezcan nuestra música.
Salir del estereotipo, dejar de lado el inglés, acercarse a la salsa y a sus recursos líricos, hablar de cosas cercanas, por ahí vamos al hacer temas para el disco-tipo-recopilación-de-canciones, pero en Pandilleros el cuento es totalmente diferente. Estamos hablando de una banda sonora de una peli que no existe, de canciones q sirven para ilustrar un guión, que deben ayudar a la comprensión de la acción, a definir personajes, a ilustrar situaciones o conflictos. Aquí se deja de lado el tema aislado y pasas a escribir para un concepto global: todos los textos deben estar relacionados, has de crear un mundo imaginario y q las letras se inserten en él y lo enriquezcan y complementen.
Al plantear las letras teníamos varias opciones: plantear las canciones al estilo musical clásico, en el que los personajes interactúan cantando (rollo Sweeney Todd, para q nos entendamos), con un libreto y personajes adjudicados a los cantantes de turno q deberan dramatizar su texto y cantarlo; o alejarnos de este tipo de musical y seguir la línea de un Shaft o un Superfly,bandas sonoras q complementan la acción, pero con canciones q pueden funcionar aisladamente y en las q el solista puede ponerse en la piel de uno u otro personaje o ser un narrador omnisciente q hable de la historia con distancia. Y como nosotros no nos planteamos pasarnos a la interpretación, por limitaciones claras, decidimos optar por éste planteamiento. Para otro artículo dejo como será el montaje teatral del espectáculo, q estamos preparando con directores de escena teatrales para hacer un show musico-escénico visualmente atractivo y cool.
Pero siguiendo con el tema letras, fuimos putillas al escoger la historia de Pandilleros. Es una historia q sucede en una época y un escenario (los ochenta en San Genís dels Agudells, barrio de Bcn en el q viven Deli y Paquito y en el q todos hemos trasnochado) q nos es familiar, y que nos permite hablar de temas en un tono y lenguaje cercano al nuestro. Para no perder el elemento verité realicé entrevistas a los dos sanjatienses para q me hablasen de sus recuerdos de infancia y adolescéncia de su barrio, de los juegos en los bosques y solares colindantes, de la llegada de los primeros yonquis y la delincuencia, de la falta de transporte público y la dejadez del ayuntamiento, de sus sensaciones personales y del ambiente de comunidad vecinal. Evidentemente esto ha servido como base para elaborar los textos de canciones como Brothers, Pueblo de Sanjatan, Pandilleros, y para definir el espacio en el transcurre la acción. Añádele un poco de épica, violencia y melodrama al estilo blaxpoitation y el resultado es muy manero y muy funk, pero encima funk de aquí, basado en nuestras vidas.
A ver si os mola.

Lalo